Manuela Sáenz, Quito, Ecuador; (27 de diciembre de 1797 - † Paita, Perú; 23 de noviembre de 1856) fue una destacada patriota ecuatoriana, además de ser la amante de Simón Bolívar y reconocida como heroína de la independencia. Es conocida también como Manuelita Sáenz y como «Libertadora del Libertador» (en referencia a Simón Bolívar).
Es considerada, con sus debidos matices, como una de las primeras feministas de América Latina y una importante líder revolucionaria de la Independencia de América del Sur. En su tiempo fue también severamente criticada por algunos de sus contemporáneos debido a su actitud extrovertida, provocadora y adelantada para la época, así como por la influencia política que llegó ejercer, llegando a ser incluso desterrada y exiliada. Aún muchas décadas después de su muerte, influyentes intelectuales e historiadores omitieron su vida en sus obras sobre la historia de la campaña libertadora, así como otros la reducían a una condición decorativa romántica y aun denigrante, tejiendo una leyenda sexual alrededor de su figura, la que sigue teniendo peso en el imaginario popular.
A pesar de las críticas, siempre acompañó a Bolívar en sus acciones libertadoras.
Solo en la mitad del siglo XX, aparecieron biografías y ensayos en los que se empezó a reivindicar su verdadero papel en la gran gesta libertadora de lo que hoy son Ecuador, Colombia y Perú.
Es considerada, con sus debidos matices, como una de las primeras feministas de América Latina y una importante líder revolucionaria de la Independencia de América del Sur. En su tiempo fue también severamente criticada por algunos de sus contemporáneos debido a su actitud extrovertida, provocadora y adelantada para la época, así como por la influencia política que llegó ejercer, llegando a ser incluso desterrada y exiliada. Aún muchas décadas después de su muerte, influyentes intelectuales e historiadores omitieron su vida en sus obras sobre la historia de la campaña libertadora, así como otros la reducían a una condición decorativa romántica y aun denigrante, tejiendo una leyenda sexual alrededor de su figura, la que sigue teniendo peso en el imaginario popular.
A pesar de las críticas, siempre acompañó a Bolívar en sus acciones libertadoras.
Solo en la mitad del siglo XX, aparecieron biografías y ensayos en los que se empezó a reivindicar su verdadero papel en la gran gesta libertadora de lo que hoy son Ecuador, Colombia y Perú.
gracias por la
ResponderEliminarinformacion
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ResponderEliminarla Wikipedia en otra página Nice!!
ResponderEliminarno me sirvio para nada alv
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Eliminarpues chupala gil es lo que hay
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